Andrés López
Socio de Hartu-Emanak
Esta mañana he conocido la muerte de D. Luis Montes. Era el
presidente de la Asociación “Derecho a morir dignamente” y desde aquí quiero
presentar mi respeto y reconocimiento, así como mi agradecimiento a su labor.
“DMD es una asociación sin ánimo de
lucro, registrada en el Ministerio del Interior con los siguientes
fines:
Promover el derecho de toda persona a
disponer con libertad de su cuerpo y de su vida, y a elegir libre y legalmente
el momento y los medios para finalizarla.
Defender, de modo especial, el derecho de
los enfermos terminales e irreversibles a morir sin sufrimientos, si este es su
deseo expreso.”
Habrá en HartuEmanak
muchos que piensen que ese no es el camino, que estén de acuerdo con quienes
allá por los primeros años de este siglo lo tacharon de asesino, aunque luego
fuera absuelto de cualquier mala praxis médica con sus pacientes terminales, a
los que ayudó a morir dignamente.
Aún así muchos, en vuestro pleno derecho, no estaréis de
acuerdo con aquello que defiende. Pero, a pocas fechas de un Encuentro
Intergeneracional dedicado a la pedagogía de la muerte, no puedo menos que
plantearme alguna pregunta de este pelaje: si llego a necesitarlo, ¿podré
disponer libremente de un suicidio asistido?
No hay comentarios:
Publicar un comentario