Por Marcela Nora Stanek
vicepresidenta y
mediadora de AMME
Publicado en EntreMayores el Miércoles
15 de Octubre de 2014
Sin duda
todos somos “mayores” para alguien: a los 35 somos mayores para los jóvenes de 20, a los 45 somos “viejos”
para los alumnos de la ESO.
Pero… ¿qué es “ser mayor”? Nos hacemos mayores cuando
envejecemos, pero hay tantas maneras de envejecer como de vivir. Imposible
definir “ser mayor” de manera universal. Y nuestra manera de vivir hoy
configura nuestra manera de “ser mayor” de mañana. También nuestra manera de
mirar a los mayores construye nuestro “ser mayor” del futuro. ¿Qué vemos en las
personas mayores? ¿Qué estamos construyendo?
Esa mirada
condiciona nuestra comunicación. En cada palabra, en cada gesto, en cada
silencio, y en cada acción, estamos revelando nuestra imagen interior de la
persona mayor. Y allí podemos encontrar respeto, valoración, admiración,
cariño, gratitud… Pero también podemos encontrar diferencias, cambios, temores,
impaciencia y faltas de aceptación…
Comunicarse
no siempre es fácil. Menos aún cuando las diferencias generacionales son
marcadas. Pero es muy importante para que la vida de nuestros seres queridos
mayores sea fecunda en cada uno de nosotros, para que podamos recibir de ellos
el mensaje que nos quieran dar, para poder resolver de manera positiva los
conflictos que se hayan ido generando o que puedan ir surgiendo.
Debemos tomar
conciencia de la importancia que tiene el trato que brindamos a las personas
mayores, por ellas mismas, por nosotros, y porque con nuestro trato y
consideración estamos enseñando a las nuevas generaciones cómo valorar y
respetar la vida.
Por ello en
Amme, (Asociación de Mediadores para los Mayores y su Entorno) hemos adoptado
esta máxima: “Los ojos con los que miramos a nuestros mayores son las manos
con las que construimos nuestro propio envejecimiento”.
Queremos con
nuestra labor ayudar a construir entre todos una mirada que reconozca sus
proyectos e ilusiones, sus intereses, que respete sus preferencias y
decisiones, que escuche sus preocupaciones, valore sus posibilidades y
dificultades. Una mirada que los redescubra como protagonistas.